En la temporada de las remontadas, el Barcelona se corona campeón después de salvar ocho puntos en contra
- El Barça superó un bache de resultados entre noviembre y diciembre con una espectacular racha en 2025
- La magia de Lamine Yamal lleva al Barça a proclamarse campeón de Liga, por Felipe Fernández


El FC Barcelona es ya oficialmente el campeón de LaLiga 2024-2025. Después de su triunfo ante el Espanyol, el club suma su título número 28 a falta todavía de dos jornadas por disputarse, gracias al colchón de siete puntos. Un colchón que se hacía impensable hace unos meses, a finales de 2024, cuando el conjunto azulgrana tocaba el que ha sido su suelo en la temporada.
El Barça de las remontadas ha plasmado esa filosofía en su evolución durante la liga. El técnico alemán Hansi Flick empezó ilusionando a su parroquia desde el comienzo, firmando un arranque liguero espectacular con nueve victorias en diez jornadas. Paralelamente, tras un inicio accidentado en Champions cayendo en su visita a Mónaco, los culés comenzaron a sumar victoria tras victoria para ponerse entre los primeros de la nueva fase regular.
La media goleadora, además, era espectacular. En el campeonato doméstico sumaban 33 goles en esas diez primeras jornadas, a más de tres por partido. Con esos mimbres se plantaban en el Santiago Bernabéu para disputar su primer clásico con el objetivo de romper una mala racha de duelos particulares frente al Real Madrid. El resultado fue una goleada por 0-4 que dejó la clasificación temblando con seis puntos de ventaja.
Parecía que estaba ya todo hecho, pero empezaron a venir los malos resultados. El clásico se jugó el último fin de semana de octubre y entonces siguieron los dos peores meses del Barça de Flick. Tampoco es que empezara mal noviembre, con una victoria en el derbi contra el Espanyol (3-1). Pero en las siguientes jornadas se sucedieron la derrota contra la Real Sociedad en Anoeta (1-0), empate contra el Celta en Balaídos (2-2) y la inesperada derrota en casa contra Las Palmas (1-2).
Flick llegó a bromear en rueda de prensa con el hecho de que se acabara un aciago mes, pero no sabía lo que le esperaba en diciembre. Y eso que empezó igual que el anterior, goleando al Mallorca en Son Moix el día 3 (1-5). Pero de nuevo, empate en su visita al Betis (2-2), derrota en casa frente al Leganés (0-1) y derrota en casa frente al Atlético de Madrid (1-2). En resumen, sólo dos victorias en ocho partidos, dos empates y cuatro derrotas. Paralelamente Madrid y Atleti hacían sus deberes, alternándose al frente de la clasificación. Ese día el líder fue el Atlético, pero el Madrid tenía un partido aplazado en Mestalla por la DANA de Valencia y terminaría la jornada cuando se jugó ese partido con... ¡ocho puntos de ventaja!
Ya con todos los partidos aplazados puestos al día, en la jornada 21, la ventaja del Madrid era de siete puntos. Parecía imposible remontar una desventaja semejante con tan poco tiempo por delante. No todo el mérito ha estado en el desmantelamiento paulatino del Madrid como equipo, sino que la mayor parte del mérito ha estado en la fe de este Barça de las remontadas.
Un 2025 casi perfecto
En liga empezó el año con un empate frente al Getafe (1-1), pero cabe decir que en realidad el Barça empezó el año goleando, puesto que en Copa del Rey dieron cuenta del modesto Barbastro (0-4), en la Supercopa de España exhibieron músculo frente al Athletic Club en semifinales (0-2) y el Madrid de nuevo en la final (2-5), para volver a la Copa y golear también al Betis (1-5).
A partir del empate frente al Getafe, el Barça encadenó una racha de nueve victorias consecutivas sólo rota por un empate ante el Betis en Montjuic (1-1). En esa jornada, que era la 30ª, el Madrid había caído en el Bernabéu frente al Valencia (1-2) y la brecha era de cuatro puntos, los que se mantendrían hasta el último clásico de la temporada. Cómo había perdido el cuadro de Carlo Ancelotti una ventaja de ocho puntos, cediendo un total de 12, era digno de análisis.
En la jornada 24 se igualaron a 51 puntos con la victoria del Barça ante el Rayo y el empate del Madrid ante Osasuna; y en la 26 se produjo el 'sorpasso' tras caer los blancos ante el Betis en el Villamarín. Por entonces cada partido del eterno rival se contaba por victoria, en su caso frente a la Real Sociedad. Los de Hansi Flick han mantenido la racha incluso en momentos complicados, como cuando se vieron 2-0 abajo en el Metropolitano para acabar derrotando 2-4 al Atlético, que ya por entonces se había descolgado de la lucha por la Liga.
El Barça remontó también un 1-3 en contra contra el Celta de Vigo (4-3), el más difícil todavía, y otro 1-0 contra el Valladolid en Zorrilla. También remontaron al Madrid en el clásico que se ha antojado como decisivo, llegando a tener un 0-2 en contra. No se pueden abstraer los resultados en liga de la marcha en otras competiciones. El conjunto azulgrana también remontó un 1-2 a los blancos en la final de la Copa del Rey en Sevilla y cayeron eliminados por el Inter de Milán en Champions, no sin antes demostrar a los 'neroazzurri' en ambos partidos su carácter competitivo y su fe ante resultados adversos (3-3 y 4-3).
Así ha sido la temporada de este Barça, una montaña rusa de goles y emociones que, al menos en Copa y Liga, ha tenido un final feliz.