Homenaje a Antonio Machado


I
EL ojo que ves no es
ojo porque tú lo veas;
es ojo porque te ve.
II
PARA dialogar,
preguntad, primero;
Después… escuchad.
XVI
Si vino la primavera,
volad a las flores;
no chupéis cera.
XXIV
DESPACITO y buena letra:
el hacer las cosas bien
importa más que el hacerlas.
XLII
ENSEÑA el Cristo: a tu prójimo
amarás como a ti mismo,
mas nunca olvides que es otro.
LII
DEMOS tiempo al tiempo:
para que el vaso rebose
hay que llenarlo primero.
LIV
TRAS el vivir y el soñar,
está lo que más importa:
despertar.
LX
CREÍ mi hogar apagado,
y revolví la ceniza…
Me quemé la mano.
LXIV
COMO don San Tob,
se tiñe las canas,
y con más razón.
LXIV
POR dar al viento trabajo,
cosía con hilo doble
las hojas secas del árbol.
LXVII
PONED atención:
un corazón solitario
no es un corazón.
LXX
TODO necio
confunde valor y precio.
LXXXIX
¿TU verdad? No, la Verdad;
Y ven conmigo a buscarla.
La tuya, guárdatela.
(Nuevas Canciones, 1924)